No hay un grupo poblacional al que se le violen más sus derechos, que a los niños. Esta es una violencia con altos índices de impunidad. No solamente se denuncia poco, sino que además en los casos que logran llegar a una sentencia, las condenas no son ejemplares. No es cierto que un violador de niños en Colombia sea castigado con 60 años. Ni siquiera un homicida de niños recibe esa condena. La situación de justicia para los niños es tan aberrante que un asesino como Luis Alfredo Garavito puede salir algún día de la cárcel, después de violar y asesinar a más de 150 niños. 

Tampoco es cierto que se cumpla con la prohibición legal que prohíbe a estos delincuentes recibir beneficios penales. Después de ser condenados, se les otorgan beneficios por estudio y trabajo y se les redime la pena. 

Fue por ese estado de indefensión en el que se encuentran los niños que insistimos en la presentación de esta iniciativa. En 2008, Gilma Jiménez (QEPD) a quien los colombianos reconocieron como "la defensora de los niños", logró el apoyo de millones de colombianos. Diferentes oposiciones de la época no permitieron que el proyecto fuera finalmente votado por los colombianos.

El gran porcentaje de víctimas de violencia sexual en Colombia son los niños. Así lo demuestran las cifras del Instituto de Medicina Legal: de los 21.000 exámenes que se practican por violencia sexual al año, más de 16.000 son practicados en menores de 14 años, miles de ellos en bebés menores de 4 años. Según el Ministerio de Defensa, en el período comprendido entre 2005 y 2015 han sido asesinados en Colombia 2.327 niños menores de 14 años. Entre ellos, han sido asesinados 502 bebés menores de 4 años. Según el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, entre el año 2008 y agosto de 2015 se han dictado 257.385 medidas de restablecimiento por vulneración de derechos de los niños. La principal causa de imposición de esas medidas es la violencia sexual, presente en 50.909 casos.  La vulneración de derechos es casi la misma en niñas y niños: de las medidas dictadas por el ICBF, en el período mencionado, 54% ha sido en niñas y 46% en niños. Los niños también son las principales víctimas de la violencia intrafamiliar. 

Este proyecto busca una verdadera justicia para los niños. Como lo manifestaba Gilma Jiménez, es el principio del fin de la peor vergüenza que nos ha acompañado durante décadas. Es convertir a los niños en los más privilegiados. La prisión perpetua será un símbolo de país. Como colombianos, le diremos al mundo que en Colombia no toleraremos que se atente contra un niño. Porque ellos son, “nuestros máximo capital social y humano". 

Solicitamos respetuosamente al Estado colombiano y a sus instituciones nos permitan decidir sobre este asunto, mediante la realización de un referendo. 

Ayúdenos con esta causa. 

http://www.yofirmoporlosninos.com/acerca-del-proyecto